miércoles

Soy de lo peor

Uno de mis mejores amigos ha cambiado. Nos conocemos desde los 7 años. Siempre nos llevamos muy bien. Sentía que era uno de esos patas que uno tiene la suerte de encontrar, que conocerá a mis hijos, que sus hijos jugarán con los míos y que planearíamos vacaciones familiares juntos cuando se fuéramos padres de familias orgullosos y exitosos.

Ahora es distinto. Ahora creo que estamos más lejanos, nuestras ideas, sus ideas, han cambiado. Fue gradual e imperceptible, no me di cuenta, pero poco a poco se fue convirtiendo en el típico intolerante cristiano que se rasga vestiduras. No lo entiendo. Me jode que ahora predique santidad y creencias que antes no tenía. Me vuelve loco soportar sus aires de humanidad sacrificada, sus pensamientos tan cerrados y su manera de indignarse por el simple hecho de ver chicas en bikinis!!! ( ojo no desnudas ni pornos, en BIKINIS!!!).

Es mi pata y lo sigo estimando, solo que ahora sus cosas me joden mas. Supongo que lo natural sería dejarlo ser, si en verdad me importan su amistad.

También supongo que ahora debo ser yo el tolerante en esa situación. No obstante, me niego a resignarme. Me niego a que mi amigo se convierta poco a poco en una persona a la cual nunca conocí y peor en una a la que no me hubiera gustado conocer.

1 comentario:

rodrigo dijo...

Las personas cambian, los amigos cambian y nosotros también, y es muy triste ver como ha medida que vamos adentrandonos en distintas esferas academicas, politicas, religiosas, sociales, etc. donde adquirimos, pulimos y modificamos nuestras creencias, progresivamente nos vemos cada vez más distanciados de los que más queremos, en miles de aspectos. Hasta que en algunos casos la conversación profunda se hace imposible y para poder interactuar con ese amigo de toda la vida, la superficialidad es el único camino. (Tengo un amigo que va a ser cura, te entiendo).
Chevere tu blog y se sintio extraño ver mi blog en tus links, paja.
Rodrigo