No me aguanto

Que cobarde puedo sentirme a veces, a veces, como ahora. Ahora, cuando veo que no me acerco a sentirme completo, a sentirme seguro de un futuro o de una razón. Ni si quiera me siento parte de algo, anexo de algo. Mucho menos me siento cercano a mi mismo

La frustración es solo una etapa de la genialidad, dicen. Pero lo cierto es que hoy no me siento ni frustrado ni genio, hoy solo puedo sentirme solo, distraído, abstraído, desterrado de toda esa realidad que tanto he tratado de construir. En estos momentos entiendo porque Coelho y Chopra son tan leídos y Diego Torres vende tantos discos.

Los seres humanos necesitamos que nos digan mentiras bonitas o verdades piadosas para poder levantarnos. No nos gusta reconocer que estamos a la deriva y que la forma como llevamos el barco es la única arma de defensa que tenemos, lo único que podemos hacer es ver el horror a los ojos e ir directo a el. Es la única forma de vivir sin medias tintas.

Hoy, repito, no busco palabras de consuelo o de ánimos, busco el dolor y la imprudencia de mis años, busco la soledad de mi silencio y la de otros, busco la invariable letanía de mis actos para poder reconocerme y escapar de mi mismo a un lugar mejor.